jueves, 20 de mayo de 2010

Inteligencia Espiritual en un contexto holista; Fernando Alfonso Gámez


 

Fundación Internacional para la Educación Holista

Maestría en Educación Holista


 


 

INTELIGENCIA ESPIRITUAL EN UN CONTEXTO HOLISTA


 

Fernando Alfonso Gamez Roman


 


 

EL CONCEPTO DE INTELIGENCIA ESPIRITUAL EN LA OBRA DE RAMON GALLEGOS.


 

El Dr. Ramón Gallegos en su libro "Inteligencia Espiritual" expone por primera vez el modelo de la inteligencia espiritual e inicia una nueva época en el campo del conocimiento. La inteligencia espiritual  relaciona el espíritu y la materia, se ocupa de la trascendencia, de lo sagrado, de los comportamientos virtuosos: perdón,  gratitud,  humildad y compasión, de comprender que somos parte de un todo con el cual necesitamos  estar en contacto.


 

Algunos lo hacen orando, otros asumiendo su responsabilidad social, practicando las leyes  espirituales del amor, paz, felicidad. Son los  que mejoran la calidad de sus vidas. Si el  intelecto se olvida de la compañía del espíritu, degrada el medio ambiente, las creencias, la familia; es decir aquello que más importa. Hoy que la educación descuida la inteligencia espiritual está creando autómatas altamente capacitados. Para que la tecnología se humanice debe congeniar con la fuente. El espíritu individual y social se nutren, la enfermedad del espíritu se paga, la bancarrota espiritual  precede a la quiebra económica.

 
 

El quiebre espiritual se produce cuando todo tiene precio pero ya nada tiene valor. Capital y responsabilidad social, cooperación, dimensión ética, fraternidad, solidaridad, son factores críticos. Si el 80% de la riqueza está en manos del 20% de la gente, hay que apuntar a cómo terminar con esa desigualdad, la injusticia, la pobreza, y la marginalidad.

La fuerza interior espiritual. Hay que trabajar con uno mismo para que la voluntad  llegue más lejos que la inteligencia. Primero encontremos nuestra misión, luego consultemos con ella, sin limitarnos a la mera interpretación sensorial. Mis pensamientos crean mi mundo, me alejaré de lo que  hago sin querer, y sembraré la semilla de lo que quiero ser, confiando en mi capacidad, en mis propósitos y superando mis limitaciones.

El Dr. Ramón Gallegos señala que la espiritualidad no siempre ha sido entendida por todos de manera correcta. Ha sido confundida, a veces, con otros aspectos de la experiencia humana que, si bien pueden tener su valor, no son el núcleo de la espiritualidad. La espiritualidad es entendida como la dimensión y el nivel incondicionado del ser humano, es experimentado como orden interno total, como ausencia de conflicto. La espiritualidad también es experimentada como amor universal y libertad incondicional. La espiritualidad no es personal. La espiritualidad no es un asunto de desarrollo personal porque la espiritualidad trasciende al ego, en sí misma es universal. La espiritualidad no nos hace más privados sino más universales, menos personales y egocéntricos, nos lleva a interesarnos en el bienestar de todos los seres, no solo en el propio bienestar.


Otro aspecto de la espiritualidad es que no puede ser reducida a creencias religiosas. Creer o no creer en Dios o en lo espiritual o en lo trascendente no tiene relación directa con la espiritualidad, porque la creencia está a un nivel de pensamiento, a un nivel cognitivo y lo espiritual trasciende la dimensión cognitiva en el sentido de racionalidad instrumental. La espiritualidad no se basa en creer en creencias religiosas, sino en la experiencia directa de lo trascendente. Tanto el que cree en dios como el que no cree han cometido enormes crímenes. La espiritualidad se mantiene siempre como el contexto más amplio y más general, como el contexto donde encontramos nuestra última entidad, el lugar de asiento de nuestros valores universales perennes.


El Dr. Ramón Gallegos nos dice que la espiritualidad no puede reducirse a una categoría psicológica. Algunos educadores han propuesto que la espiritualidad deberíamos pensarla en términos más psicológicos, como pensamientos y sentimientos, pero la vida mental no es la esencia de la espiritualidad; cuerpo, memoria, pensamientos y sentimientos cambian, mientras que la espiritualidad permanece como aquello a lo que recurrimos como la última fuente en donde encontramos el significado y las respuestas a las preguntas fundamentales de la vida. La espiritualidad trasciende el aparato psíquico de pensamientos y emociones. Podemos tener pensamientos y sentimientos agradables o desagradables y podemos tener imágenes agradables o desagradables pero mientras eso cambia nuestro espíritu, nuestra espiritualidad, permanece como nuestra esencia.


La espiritualidad tampoco puede reducirse a lo paranormal. Algunos educadores tratan de definir la espiritualidad asociándola a lo paranormal. Sin embargo, independientemente de que sean reales o no, fenómenos como la telepatía, la clarividencia, la levitación, no son, en sí mismos, el objetivo de la vida espiritual. Tener la capacidad de levitar o no levitar no nos da orden interno, no nos da la libertad ni nos da amor incondicional. Aunque lo paranormal sea interesante y pudiera ser real no es lo mismo que lo espiritual. Esto ha sido claramente señalado a través de la historia por prácticamente todos los grandes maestros espirituales. Aun más, han sugerido mucha precaución para todas aquellas personas que están en una búsqueda sincera de sí mismos para que estén alertas a la propia vanidad y no busquen poderes paranormales. Estos consejos están en todas las grandes tradiciones, porque pueden fortalecer ilusiones muy sutiles, se puede engrandecer nuestro propio ego.

El Dr. Ramón gallegos nos enseña que la espiritualidad tampoco puede ser reducida a un desarrollo personal. El desarrollo personal básicamente es el desarrollo de la persona. Para Carl Jung, la persona es la máscara, el conjunto de roles, de papeles, de etiquetas sociales que nos hemos puesto o que nos han puesto. Entonces, quizá el desarrollo personal sea interesante, quizá sea adecuado tener mejores modales, poder hablar mejor, poder relacionarse mejor con otros, pero nada de esto es vida espiritual en sí misma; la vida espiritual trasciende todo esto. Cuando vemos la espiritualidad como una apertura a lo universal nos ayuda a evitar el falso problema de enfatizar el desarrollo personal o el desarrollo social. Este es un falso problema creado porque tenemos la idea de que la vida espiritual es individual y nada es más falso que eso. La espiritualidad es universalidad y no puede haber vida espiritual personal porque la persona es la máscara, es el ego.


Toda acción social debe estar basada en la genuina espiritualidad, porque es lo que nos da la universalidad del amor incondicional, la fraternidad, compasión y humildad. Por eso la filosofía perenne señala que al final del camino de una transformación espiritual está el servicio desinteresado por toda la humanidad. Necesitamos superar el dualismo entre desarrollo personal o desarrollo social. La espiritualidad es sumamente importante porque es la genuina base para indagar las preguntas fundamentales que niños y jóvenes se hacen y nos hacen de manera natural. Todos hemos observado en los niños pequeños o en los adolescentes su capacidad para preguntar, estas preguntas son sumamente importantes. En la educación, sin embargo, estas preguntas han sido frustradas por los sistemas educativos y poniendo limites muy estrechos a las capacidades de los seres humanos.


La espiritualidad nos lleva a la percatación de que el conocimiento adecuado del universo que habitamos solo es posible si está relacionado con el propio autoconocimiento, que no es posible tener un conocimiento responsable del universo que habitamos si no nos conocemos a nosotros mismos. Esta es una declaración que va en contra de los paradigmas tradicionales educativos, porque la visión educativa tradicional nos dice que podemos conocer el mundo independientemente de si nos conocemos a nosotros mismos; señala que entre más lejos estemos de nuestra propia realidad interior mejor será, que seamos objetivos. Por eso hemos creado un conocimiento solo instrumental.


El Dr. Ramón Gallegos señala en su libro que la espiritualidad es la necesidad de pertenecer a una totalidad mayor, de relación con la totalidad, de conexión universal. La espiritualidad no depende de la riqueza o la pobreza económica. Algunos educadores creen que para poder entrar en la vida espiritual primero necesitamos tener cierta riqueza material, tener automóvil, casa o cosas así, pero realmente el confort no nos conduce a la espiritualidad. La idea de tener satisfechas primero las necesidades básicas como prerrequisito para la espiritualidad es una idea equivocada y peligrosa porque puede llevar a creer que los grupos humanos que no tienen riqueza material son seres antiespirituales y que las comunidades que tienen riqueza económica y tecnológica tiene seres muy espirituales. En realidad no hay una relación de causa y efecto entre la vida espiritual y la riqueza o la pobreza material. Es un mito la idea de que primero necesitamos tener riqueza material para luego desarrollar la espiritualidad. Los seres espirituales son seres sencillos, son seres humildes en el sentido de que se perciben en una relación de igualdad con todos los demás. No es necesario tener primero dinero para empezar luego con una vida espiritual.


El Dr. Ramón Gallegos señala que la espiritualidad es transracional. La espiritualidad trasciende la razón, no la reprime, no la rechaza. Esto quiere decir que el hombre espiritual es razonable pero va más allá de la razón. Aquí es donde el concepto de inteligencia espiritual es importante. Hay una basta experiencia humana más allá de la razón y el lenguaje que no es experiencia regresiva o psicótica sino experiencia espiritual de la más alta inteligencia. La espiritualidad es amor universal. El amor universal es central porque el conocimiento es importante pero nunca suficiente para un comportamiento responsable. El conocimiento en sí mismo no nos hace mejores personas, por eso tenemos que ir más allá del conocimiento, tenemos que entrar a una dimensión que trascienda el conocimiento, la razón y el lenguaje. El amor universal es la puerta de la trascendencia del mundo espiritual. Qué sentido tiene para una sociedad como la actual, basada en una conciencia depredadora, generar más conocimientos si este conocimiento va a ser usado para la destrucción de nosotros mismos y de nuestro planeta, de qué nos sirve tener más tecnología, si este conocimiento va a ser usado para destruirnos a nosotros mismos. Es necesario redefinir el papel del conocimiento y ponerle sus justos límites.


El conocimiento debe responder al precepto de que todo conocimiento debe ser usado para el bien común, el conocimiento holista es inseparable de una dimensión espiritual. El conocimiento holista no viene desligado del bien común, no se concibe como una transmisión de técnicas o métodos para que sean usadas como ustedes quieran. El conocimiento holista viene ligado a una orientación que honra la vida en la tierra, a una orientación de gratitud por la vida, con un sentido de compasión hacia todos los seres. Solo entonces podemos decir que hay un genuino despertar de la inteligencia.

Recientemente el concepto de inteligencia espiritual ha venido a revolucionar el campo de estudio de las inteligencias. A principios del siglo XX el concepto de inteligencia intelectual fue la gran novedad. Binet impulsó este concepto desarrollando los test de coeficiente intelectual (C.I.) y la inteligencia se entendió básicamente como una habilidad intelectual lógico-matemática, una habilidad para el desempeño técnico eficiente. Más recientemente surgió el concepto de inteligencia emocional, Daniel Goleman fue el gran promotor argumentando que tenía una importancia igual que la inteligencia intelectual ya que las emociones equilibradas nos permiten pensar mejor. Ahora ha surgido una tercera inteligencia que engloba a las dos anteriores y las supera, convirtiéndose en el centro del desarrollo para todos los campos de la experiencia humana: la inteligencia espiritual.


El Dr. Ramón Gallegos nos dice que la inteligencia espiritual es la más importante de las tres, además es exclusivamente humana. Mientras que animales y computadoras muestras evidencias de inteligencia emocional e intelectual, la inteligencia espiritual es de exclusividad humana. La inteligencia emocional está arraigada en nuestro cuerpo biofísico, depende de nuestros instintos, sentimientos, pulsiones, hormonas, etc., para dar una respuesta emocional aceptable a una situación particular. Los animales también muestran inteligencia emocional. Para lograr atrapar su presa, un tigre necesita ser silencioso, esperar la oportunidad, posponer la satisfacción, atacar en el momento indicado. Existen también situaciones humanas negativas que muestran una alta inteligencia emocional. Por ejemplo, los casos de asaltantes, en los cuales se requiere controlar las emociones para poder efectuar el asalto a un banco; o el caso de un defraudador que requiere estar tranquilo aun sabiendo su acto indebido. Esto significa que la inteligencia emocional no otorga dirección moral o ética a la conducta, solo capacita para el control emocional de la situación pero sin alcanzar a ver el sentido o significado global de la misma.


 

BIBLIOGRAFIA.


 

- Gallegos Nava Ramón (2000) El espíritu de la educación. Integridad y trascendencia en educación holista. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2001) La educación del corazón. Doce principios para las escuelas holistas. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2001) Educación holista. Pedagogía del amor universal. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2001) Una visión integral de la educación. El corazón de la educación holista. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2001) Diálogos holistas. Educación holista y filosofía perenne I. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2003) Aprender a ser. El nacimiento de una nueva conciencia espiritual. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2003) Comunidades de aprendizaje. Transformando las escuelas en comunidades que aprenden. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.
- Gallegos Nava Ramón (2003) Pedagogía del amor universal. Una visión holista del mundo. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2004) Sabiduría, amor y compasión. Educación holista y filosofía perenne II. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2004) El Camino de la filosofía perenne. Educación holista y filosofía perenne III. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2005) Educación y espiritualidad. La educación como práctica espiritual. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


- Gallegos Nava Ramón (2007) Inteligencia espiritual. Más allá de las inteligencias múltiples y emocional. Fundación Internacional para la Educación Holista, Guadalajara.


 

RAMON GALLEGOS: INTELIGENCIA ESPIRITUAL.

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